APLICACIONES

“Si puedes soñarlo, puedes entrenarlo”

Esta es una frase muy conocida y utilizada en el mundo del “clicker” (“if you can dream it, you can train it”). Quiere decir que cualquier cosa, dividida en suficientes pequeños pasos y entrenada con suficiente tiempo, es posible (dentro de las limitaciones mecánicas de un caballo, claro está).

Se puede utilizar el entrenamiento con el “clicker” de muchas maneras distintas. Aquí ponemos algunos ejemplos:

    • Actuación en pruebas hípicas: ya sean concursos de salto doma, o cualquier otra disciplina.
    • Solución de problemas: ya sean puntuales (subir al remolque, poner vacunas, dar los cascos, etc), como generales, en caballos catalogados como “problemáticos”.
    • Agility: entrenar en libertad ejercicios en suelo.
    • Crear caballos más seguros: entrenando al caballo a tocar objetos extraños, pisar sobre cualquier superficie, etc.
    • Comunicación: “bailar” con el caballo en libertad, coordinar los movimientos, responder a la voz, todo esto incide en una mayor comunicación entre el caballo y su dueño.
    • Diversión: se le pueden enseñar al caballo todo tipo de trucos y juegos, desde subirse a un pedestal hasta encestar una pelota. Todos ellos mejoran las habilidades mecánicas de los caballos y, de nuevo, la comunicación con sus dueños.
    • Inteligencia: un caballo es capaz de distinguir entre colores, formas, números y letras.

 

Algo a tener en cuenta, es que normalmente cuando entrenas algo, estás entrenando también otra cosa (o unas cuantas más), por lo que estos apartados no son independientes entre sí. Cuando entrenas cualquiera de ellos, estás entrenando también algo de los demás.